No te tapes la nariz

¡A cactus muerto, cactus puesto!

¡A cactus muerto, cactus puesto!

Ya os dije en su día, que lo mío no eran las plantas. ¡Si hasta se me mueren los cactus!
A mi favor, he de decir, que éste, me ha durado casi un par de años.

Para llenar el gran hueco que dicha planta deja en mi hogar, qué mejor que suplirla por otra; pero esta vez por una a la que no hay que dedicarle tanto tiempo y mimo. Basta con coserla y rellenarla una vez y listo. Además, al lado va un marinerito que le hará mucha compañía (los dos echarán de menos el agua)
¿Os gusta?

(Menos mal que el hueco no era el de un pino,sino...)








La vuelta a casa desde Cerdeña

Ya estamos de vuelta, después de unas estupendas vacaciones.
Han sido geniales: Hemos estado 10 días en Cerdeña, preciosa y grande isla italiana, y 3 en Barcelona (una vez más).

Lo mejor de todo ha sido sentir de lleno el verano: No había un día en el que no saliera el sol y en el que no nos pusiéramos sandalias; no había día en el que no comiéramos/cenáramos en una terraza con niki de tirantes; no había día en el que no nos diéramos crema para no  quemarnos; no había día en el que no nos pusiéramos los bañadores, no había día en el que no nos echáramos unas carcajadas...Y esque ése es el verano que me gusta.

Cerdeña tiene unas calas y unas aguas cristalinas maravillosas y un paisaje verde lleno de acantilados. La gente italiana nos ha sorprendido grátamente, ya que son muy amables y simpáticos (nada chulesca cómo esperaba).

Hemos estado muy relajados y desconectados del mundanal ruido de la ciudad y la rutina diaria. No teníamos internet y apenas llamadas por eso del dinerillo que cuesta, así que ha sido un aislamiento gozoso.

La gastronomía, cómo os lo podéis imaginar, ha sido mucha pasta y pizza. Se come muy bien, pero es cierto, que todos los restaurantes ofrecen lo mismo y no hay mucha opción de cambiar de menú. El pan, una maravilla.

Lo peor de Cerdeña, ha sido indudablemente los mosquitos tigres que nos picaban. Un suplicio. Además, en mí los picotazos hacían una reacción alérgica extraña, y se me hinchaban los granos, abarcándo, en algunos casos, todo el muslo, pierna...(pero sólo era algo visual que al día siguente desaparecía, nada grave).

Barcelona: No me canso nunca de ir a esta gran ciudad. Hay taaaaaaaaaanto que hacer allí, taaaantas cosas que degustar, taaaaaantas calles que recorrer y taaaaaaaaaantas cosas qué comprar. Barcelona ha sido el colofón final de las vacacines. Aunque hacía mucho calor y hemos pateado cosa fina, Barna: nunca me canso de visitarte. Éso sí: siempre con vuelta a casa.

Pero todo lo bueno tiene algo malo (además de un fin): los kilos demás que me traigo, el dinero de menos que me traigo, la pequeña depresión postvacacional que me traigo y las ganas de volver a viajar que me corroe por el cuerpo.

Pero si hay algo que sin lugar a duda ha sido lo mejor, ha sido la compañía: este viaje sin nuestros amigos del alma Txaki y Totu nunca hubiera sido el mismo. Nos encantáis y ahora, toca planear el siguiente verano, guapos!!












Éstas son algunas de mis compritas:

¡¡NOS VAMOS DE VACACIONES!!

Quiero aprender a dibujar y por éso estoy experimentando.
El otro día me dió por hacer dibujillos de personajes  porque no sé hacerles cuerpos y quiero aprender.
Algo sale, pero no sé ponerles posturitas diferentes.
Y ya si quiero empezar a hacer escenarios y situaciones diferentes, la cosa se complica (gente en bici, nadando, volando, en moto...uufff).
¿Cómo puedo aprender?...supongo que "dale que te pego" dibujando, ¿no? Aunque creo que con éso se nace. Es un talento innato. En fin.

De todos modos, el sábado nos vamos de vacaciones, así que postpondré lo de ser autodidacta hasta la vuelta.

Ya os contaré qué tal las vacaciones.
Chicos/as...¡¡¡nos vamos a Cerdeña y Barcelona!!!!!!
¡Volvemos el 19 de Agosto!
¡¡¡Aioooo!!!